Como en un sueño en el que me esfuerzo por revivir mentalmente una y otra vez, siendo el tiempo ese enemigo despiadado e inevitable, que me hace perder en cada fracción de segundo un detalle, que quiero agarrar pero que sé que es vano; un detalle que no es detalle, que hace al sueño, pero que se va, escurridizo, se va cayendo, junto a otros, con el pasar de los días, entre mis dedos, y otro detalle, que va desapareciendo, cada día un poquito más... Así se va, despacito...contra mi voluntad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario