viernes, 23 de diciembre de 2011

Anoche soñé que mi abuela caminaba, que yo cantaba eufórica en un escenario y que preparaba una clase de yoga:llamado de atención a que, aunque a veces me rehusé por cliché y convencional, necesito contemplar mi año, balancearlo, cerrarlo. Es bajar la ansiedad, agradecer, retomar, volver a abrir.
2011, fuiste hermosamente benévolo. Compasivo, me mostraste el amor, crecimiento y mi sed de equilibrio.
Dos títulos me demostraron a aún confundida, atormentada, sigo queriendo saber,si, cual orgullosa geminiana...
Que quiero entregarme, escucharme, cuidarme seguir disfrutando del yoga, del arte, la música, la amistad y el amor.

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